14 de junio de 2011

Hasta Siempre

     Desde esta página, queremos rendir  un homenaje a nuestros niños de 3º de Infantil, los mayores del ciclo, que la próxima semana se graduarán… recibirán su primer diploma y recordaremos los mejores momentos  vividos en esta etapa que en breve concluirá.
     Porque fuisteis una gran promoción… desde aquí nuestra admiración.





     Había una vez un arbolito feliz. Entre sus ramas había pichones traviesos que jugaban y piaban todo el día.

El árbol conocía muy bien a todos  y los quería, los quería tanto...
Cuando hacía frío los pichones se acurrucaban entre sus hojas y si el sol
calentaba poco, el  árbol, moviendo sus ramas, les hacía dar saltitos invitándolos a jugar.

Pero un día, entre saltito y saltito, los pichones subieron  la rama más alta del árbol y vieron un azul hermoso y un bosque lleno de otros árboles que no conocían.

Se dieron cuenta entonces que sus alitas habían crecido lo suficiente como para intentar volar. Un aleteo...y otro más...y por  fin el cielo no pareció tan lejano. Uno a uno, los pichones se fueron volando.
El árbol los miró partir con orgullo, porque entre sus ramas los había cuidado durante mucho tiempo. Él sabía que en una tarde de lluvia los volvería a ver acurrucándose entre sus ramas, los recordaría siempre a cada uno de sus pichones.

     Esa noche el árbol quedó sólo y vacío. A la mañana siguiente no sólo el rocío mojaba sus hojas....nadie se había dado cuenta que había llorado.

1 de junio de 2011

FLORES A MARIA

      El mes de mayo,  como todos ya sabéis, es el mes de las flores, el mes dedicado a María, nuestra Madre.    En la clase, en el altar que hemos puesto en nuestro edificio de Infantil,  la hemos recordado cada día de una forma muy especial, le cantamos canciones, le recitamos poesías y le dedicamos  grandes piropos, porque María es Madre, Amiga, Reina, Incomparable, Auténtica…
     Ha sido muy emocionante escuchar de sus pequeñas voces pedirle a la Virgen María sus cositas dichas con tanta espontaneidad y entregarle las flores que con tanto cariño le traían.



Cuando entro en mi colegio
 y te veo en mi jardín,
todas las flores del mundo,
las traería para Ti.

Como soy tan pequeña
y no lo puedo lograr,
te doy mi corazón
que no te deja de amar.

Ampáranos Madre Buena,
que subimos a tu altar,
con mi seño de la mano,
con ramitos de azahar.